Cazadores de sueños.

“Si es bueno vivir, todavía es mejor soñar, y lo mejor de todo, despertar”. Antonio Machado Ruiz, gran poeta español y el más joven representante de la llamada generación del 98, fallecido en el exilio francés en 1939.

Vivir es un ejercicio, pesado en ocasiones y siempre necesario; y como todo ejercicio, requiere de perseverancia para lograr resultados.

Cada cual es libre de marcarse metas, de ver pasar la vida o incluso de vegetar de forma permanente.

Y en ese ejercicio tan complejo, tan increíblemente complejo, que supone vivir….. los sueños son un pilar que sustenta nuestra naturaleza, nuestra imperiosa necesidad de ser o tener.

Hay quien alimenta sus sueños, hay quién simplemente los observa y los considera inalcanzables…..y existe una raza especial, de hombres y mujeres, una estirpe que perdura desde que el ser humano pobló este planeta…..son los cazadores de sueños.

Juramentados en torno a un modo de ser, iguales en tesón y perseverancia, ubicados en cualquier país, estrato social y comunidad.

Nacemos iguales, indefensos y dependientes, nacemos preparados para absorber; la propia vida nos dará capacidades, debilidades y nos quitará aquello que no podamos o sepamos tener.

Pero esa misma vida, corta e intensa, nos da a todos sin excepción un tesoro incalculable; la capacidad de soñar y en su momento despertar como culminación de cualquier sueño.

Y ellos, los cazadores de sueños, desde la noche de los tiempos han perseguido cada sueño hasta darle caza, hacerlo suyo y despertar al resultado.

En este nuestro país, hemos dado a luz una ingente legión de cazadores de sueños; hombres y mujeres que a pesar de las dificultades, a pesar de la miseria material e intelectual, han sabido ser constantes, machaconamente tozudos y admirablemente tenaces.

Y toda sociedad se mueve y avanza, o se estanca y retrocede, gracias a esa estirpe de seres vivos…. capaces de anteponer la persecución de un sueño a la agonía de la realidad.

Los animales no persiguen sueños, no precisan de ese ingente ejercicio, los animales son en ocasiones el sueño en sí.

Nos admira su libertad, nos apasiona su comunión con la naturaleza y nos subyugan sus misteriosos sentidos; a tal extremo que lejos de emular su condición asesinamos su ser.

Es la triste historia de nuestra miserable capacidad para matar todo aquello que no podemos tener, matamos sentimientos cuando no podemos alcanzarlos, y matamos animales por el puro placer de matar…..un placer que esconde debilidad, envidia y falsa supremacía.

El lobo ha sido el máximo exponente, o uno de los grandes perjudicados, animal totémico dónde los haya; admirado, temido, perseguido y exterminado.

Los cazadores de sueños saben que en ese exterminio, en esa histórica persecución, el hombre ha descargado sus miserias y su peor lado oscuro en ese ejercicio penoso.

Hemos querido contener el agua entre nuestros dedos, encerrar la libertad en una jaula y abatir a tiros un sueño.

Pero en esa vorágine destructiva hemos llegado a puntos intermedios con el lobo, lo hemos querido domesticar; y vimos la oportunidad con la hibridación de las especies.

Nació el perro lobo checoslovaco, creció a duras penas en un entorno militar y de servicio para los intereses del hombre….pasó a manos civiles y tuvimos la oportunidad de compartir un sueño.

Con mayor o menor fortuna, todos los que admiramos al lobo, nos hemos convertido en cazadores de ese misterioso sueño; el perro lobo checoslovaco encierra una parte importante de esa libertad, de esa capacidad sensitiva, de ese misterioso mundo extra sensorial.

Una vez cazado el sueño, o al menos parte de él, nos toca despertar…..Antonio Machado afirmó que lo mejor del binomio vida – sueño es el despertar.

Y sin duda lo es, es el momento de ver, de tocar, de sentir, de llenarnos con lo bueno y malo y de intentar comprender; es el momento de devolver al sueño su derecho a pervivir.

Todo cazador de sueños sabe que lo realmente importante, lo que da sentido a dicho ejercicio, es el respeto a la presa…..una vez a nuestro lado, una vez alcanzada…..hemos de respetar su SER.

Valorar el esfuerzo empleado, aquilatar la razón del camino recorrido y saber que todo lo que vale cuesta y todo lo que llega a costar tiene un valor incalculable.

Y el perro lobo checoslovaco no es una excepción, representa a la libertad, es heredero de la naturaleza y ante todo rey de los sueños.

Merece un respeto, merece ser observado con ojos imparciales, merece todo lo bueno que podamos aportarle y nos devolverá el reflejo de la naturaleza.

Cazar un sueño no es un ejercicio de destrucción, nunca puede ser la meta en sí misma; cazar un sueño es acercarnos con mucha dificultad hasta él, tocarlo, sentirlo, empaparnos con su belleza y beneficio y respetarlo.

De lo contrario mataremos los sueños, asesinaremos a todos y cada uno de ellos; no dejaremos nada a los nuevos cazadores de sueños….. y la vida será simplemente un ejercicio mecánico de supervivencia.

De cómo tratemos a esta raza, de cómo seamos capaces de entenderla y preservarla depende su futuro; el sueño primigenio…el lobo…está casi exterminado, y lo peor de todo es que matamos la ilusión día a día….con cada lobo exterminado matamos un gran sueño.

Nosotros, todos aquellos que hemos alcanzado un sueño pequeño, tenemos la obligación de preservar a esta raza en todo su esplendor, con lo bueno y lo malo pero con honestidad.

El gran sueño puede que algún día vuelva a recorrer libre nuestros bosques y nuestras montañas….mientras tanto hagamos que sus herederos puedan mirar hacia el bosque con una mirada misteriosa, limpia y única.

Un cazador de sueños siempre despierta a su enorme grandeza.

De opiniones y pareceres.

Lo que inquieta al hombre no son las cosas, sino las opiniones acerca de las cosas”. Epicteto de Frigia filósofo griego que vivió parte de su vida como esclavo en Roma, perteneciente a la denominada escuela Estoica y fallecido en el 135 d.C.

Y el problema reside, fundamentalmente, en que las opiniones son subvencionadas al cien por cien por nuestro ego, se vierten cual siembra otoñal y nos la sopla si son fundamentadas o fruto de intereses particulares o colectivos.

He meditado seriamente abandonar esta necesidad de escribir, cerrar estas páginas y guardar el libro de mis pocas experiencias.

Pero he reflexionado, lo poco que me permite mi subjetiva apreciación, y he considerado que al igual que yo –  hace tres años – hay personas que se acercan a este mundo con ilusión; personas limpias de todo prejuicio, con necesidad de conocer e informarse, personas al fin y al cabo que merecen compartir lo poco que puedo ofrecer sobre lo que denominamos el “mundo del perro lobo checoslovaco”.

Y existe demasiada estulticia, demasiada visión mercantilista, demasiados grupos de presión interesados….existe todo un entramado urdido en torno a esta raza.

Y no es una opinión, es un hecho contrastado; retomando la frase de Epicteto lo que inquieta a esos hombre y mujeres, no son las cosas de ese mundillo…..les inquietan las opiniones.

Por lo tanto hay que cerrar, de una puñetera vez por todas, el capítulo de las opiniones; enterrarlo en cal viva, y abrir el libro de los hechos.

Abrirlo y airearlo, sacarlo de las estanterías llenas de polvo y moho; permitir que la luz alumbre hechos, historia, comportamientos, problemas y enfermedades.

Todo un ejercicio titánico, tarea a la que desde el primer día y el primer artículo he intentado aportar algo simple….sencillo y nada pretencioso.

Mi propia experiencia, mi subjetiva vivencia y mi concreta observación son aportaciones escasas; lo son sin duda alguna, no me alumbra la ciencia infusa, no soy veterinario ni etólogo.

Soy, simplemente, un apasionado de esta raza…que convive con dos ejemplares…. y que anteriormente ha convivido con otras razas durante más de 25 años.

La pasión puede ser un defecto, lo reconozco, pero en sí misma es combustible para el conocimiento; cuando nos apasiona algo intentamos desmenuzarlo, alcanzarlo en su plenitud, hacerlo nuestro…y ello conlleva interés, curiosidad y empeño.

Resulta muy difícil sustraerse al entorno, imposible obviar que vivimos en sociedad, de todo punto imposible ignorar lo que nos rodea….no somos una ínsula en medio de un océano.

Por ello mismo no puedo dejar de considerar, en cada artículo, la globalidad que afecta a esta raza maravillosa.

Y ante todo un hecho que considero crucial y clave, al igual que en cualquier otro ámbito….en todos y cada uno en los que interviene el ser humano….lo importante son las personas.

Personas que se mueven por intereses, por sincera pasión, por estúpido gregarismo o porque les sale del moño y no tienen otro pito que tocar.

Seres humanos maravillosos, políticos frustrados, mercaderes ambiciosos, científicos de salón, chafarderos profesionales y un sin fin de especímenes que, con la bandera del perro lobo checoslovaco, viven su sueño personal.

Es así, son hechos objetivos, nos guste o no; y en ello seguimos, con nuestras virtudes y nuestros inmensos defectos.

Uno no está libre de su condición humana, ni es portavoz de nadie…. ni un visionario, ni un gilipollas.

Tampoco he pretendido ser un endogámico de las ideas y vivencias, pero sobre todo no ha sido fácil sobrevivir a este entorno del mundo del perro lobo checoslovaco; la Santa Inquisición pervive, se criminaliza la disidencia, se propicia la categoría de palmero y se endiosan colectivos y personas.

Sinceramente hace falta aire fresco, veracidad, rigor histórico, sinceridad y ante todo……al igual que un drogodependiente o un alcohólico…..reconocer que tenemos un grave problema.

He ahí la clave, reconocer que la raza peligra en toda la extensión de la palabra; reconocer que la proliferación de camadas, cual amapolas en el campo, no es razonable y traerá más pronto que tarde consecuencias nefastas.

Reconocer, de una puñetera vez por todas, que no estamos haciendo bien las cosas; que la selección de ejemplares reproductores está llegando a un extremo de pura endogamia, que la socialización temprana y posterior brilla por su ausencia, que no existe una mínima selección de futuros dueños que puedan asumir el compromiso de convivir con esta raza.

En definitiva lavarnos la cara de tanta mugre acumulada, de tanta estupidez y de tanta arrogancia; si no reconocemos que existe un grave problema,  jamás lograremos iniciar su solución.

Es por ello, por ser honesto con la raza, por ser consecuente con mi pasión, por lo que continuaré escribiendo.

Aporreando el teclado cual poseso, errando y tal vez acertando…pero siempre movido por la imperiosa necesidad de compartir y aportar lo poco que pueda.

En definitiva…… el ser humano creó esta raza con una finalidad concreta, clara y diáfana, mezcló lo mejor de la naturaleza con lo más manejable a su alcance, evolucionó hasta nuestros días arrastrando su SER…..ese SER nos ha dejado en herencia problemas y características que deseamos erradicar, peculiaridades que nos resultan incómodas e incompatibles con nuestra vida diaria.

Hemos generado enfermedades por desidia e interés económico, somos culpables sin necesidad de juicio previo, todos…sin excepción.

Por lo tanto, mientras las patas de un plc acaricien nuestros campos y ciudades, mientras ese espíritu libre sobreviva a nuestras estupideces, seguiré preocupándome por las cosas y nunca por las opiniones.

Esto último queda en manos de quienes disfrutan, mareando la perdiz y manteniendo el “prestigio” inmaculado de los dioses del perro lobo checoslovaco…..yo por mi parte me declaro ateo. 

Ciro y los mercaderes del templo.

Haces mal en ilusionarte, yo estoy lejos de todo. Tan lejos que me da asco”. Julio Florencio Cortázar, intelectual y escritor argentino nacionalizado francés en protesta contra el gobierno militar de su país; fallecido en 1984.

La ilusión es un sentimiento peligroso, no por aquel que lo alimenta o lo vive; no….la ilusión es un sentimiento peligroso cuando el ser humano interviene y lo hace de manera negligente, interesada o incluso bastarda.

Todos pasamos por momentos duros cuando la ilusión se trastoca en decepción, todos hemos vivido situaciones en las que la intervención de terceros destruye nuestras ilusiones y nos deja como herencia un problema añadido.

Hay diferentes templos, lugares y ámbitos sagrados por su significado; el templo de la devoción es importante, muy importante.

Y este que suscribe ha tenido, tiene y siempre tendrá devoción por esta increíble raza llamada perro lobo checoslovaco.

Esta devoción ha sido un camino largo y tortuoso, lleno de sinsabores de alegrías y de momentos únicos; un camino en el que lo verdaderamente importante ha sido, es y será convivir y disfrutar con nuestros animales.

Hace ya más de un año emprendimos una nueva etapa en dicho camino, con una ilusión desmedida, con la esperanza gratificante de la aventura de criar un nuevo cachorro de plc.

Buscamos un macho, para llenar el hueco que dejo a nuestra perra loba checoslovaca sin compañero al morir el macho con el que se crió.

Podíamos haber buscado en España, era lo más sencillo quizás; pero nos enamoró un ejemplar ubicado en Polonia, Yipon z Peronowki.

Tras muchos avatares encontramos a la criadora polaca Agnieszka Wójtowicz, con el afijo Wilk z Basni, quien cruzó con Yipon; reservamos un macho con la ilusión de primerizos.

Y llegó el momento, nacieron y alcanzaron los dos meses de edad, acordamos su recogida en Italia, nunca quisimos que el cachorro sufriera el estrés de un vuelo, y planeamos el viaje con ilusión y emoción.

En ese momento la criadora nos informa al respecto del cachorro que nos había tocado, por opción no por elección, para nuestra sorpresa nos indica que tiene un testículo sin decender totalmente.

Sin embargo nos indica, por activa y pasiva, que los veterinarios le afirman que existe un 90/96% de posibilidades de que ese órgano descienda a su sitio sin mayores problemas.

Imaginen la sorpresa y valoren todo el esfuerzo realizado, la reserva, el seguimiento, la preparación del viaje….y ante todo que ya existía un vínculo con Czarodziej (nombre puesto por la criadora y al que añadimos el de Ciro) un extraño vínculo de responsabilidad.

Si…podíamos haber rechazado al cachorro, de sobra lo se; pero nos aferramos cual náufrago a la tranquilidad de las previsiones que la criadora nos transmitió.

Y llegó el ansiado viaje, más de 3000 kilómetros por carretera entre ida y vuelta; un viaje inolvidable, un regreso con Ciro en brazos… tan especial, tan tremendamente especial.

Y pasaron los meses, cumplió 3, 4, 5 y 6 meses; los veterinarios, que vigilaban su evolución, nos indicaron que no era muy normal que no hubiese descendido a los 6 meses….. pero que teníamos tiempo hasta el año de edad.

Y el sufrimiento inició su andadura, la esperanza unida al sufrimiento, hasta que llegó el año de edad y concertamos cita con el especialista en ecografía; una hora de exploración, una hora sujetando a Ciro mientras el especialista intentaba localizar el segundo testículo….para concluir que no lo visualizaba, ni próximo ni en el abdomen.

La veterinaria, con más de 30 años de experiencia en cirugía, nos indicó que no quedaba otra solución que una cirugía más invasiva para localizar y extirpar el testículo (probablemente atrofiado) y en definitiva proceder a la castración total.

Imaginen, valoren, sientan el momento, visualicen su mirada mientras lo sujetaba a la mesa……

La malformación genética se denomina criptorquidia, y en determinadas especies como los perros es hereditaria por lo que se descarta su empleo para la reproducción.

Hasta este punto hechos objetivos y sentimientos a flor de piel, hasta aquí lo vivido sin detenernos a reflexionar; hasta estas líneas un mazazo.

Y lo ha sido por una sencilla razón, me considerarán estúpido o poco realista pero la mutilación no es de mi agrado; se que cuando es necesaria no queda otra, de sobra lo se, del mismo modo se que aún hoy el alcance de dicha práctica está por estudiar….las consecuencias en el animal en definitiva están aún por dirimir.

Y bien, tras lo anterior comunicamos con la criadora…..siempre afirmaré que estuvo en todo momento preocupada y cercana al problema…..cual fue nuestra sorpresa cuando nos confirma que ante el problema de Ciro ha realizado indagaciones…. y sabe a ciencia cierta que existen ejemplares, concretamente un hermano de Yipon z Peronowki, con la misma malformación hereditaria.

Y aquí me perdonarán que tome aliento y respire hondo, que cuente hasta mil para poder seguir escribiendo…..

Una malformación genética de transmisión hereditaria…….verán ustedes uno, que no es docto en la materia, se ha preocupado forzosamente de informarse con especialistas.

Y la situación es simple dentro de la complejidad y aquello que el azar pueda deparar.

En el macho es palpable, visible y notorio….por lo tanto si una camada aporta la manifestación visible de la malformación, si un solo ejemplar macho de dicha camada resulta con criptorquidia hay que evitar utilizar a TODOS los machos de esa camada como reproductores.

Sencillamente una medida profiláctica simple, al alcance de cualquiera, ya que en las hembras resulta imposible determinar sin pruebas genéticas si son portadoras o han desarrollado la malformación.
Por lo tanto, si se aparta de la reproducción a los machos de una camada, en la que uno sólo haya manifestado la malformación, estaremos eliminando un problema……uno sólo y quizás a pesar de ello no se logre erradicar la criptorquidea.

Pero un criador con una hembra, pongamos por caso, que tenga desarrollada la malformación nunca correrá un riesgo elevado si cruza con un macho en el que su camada y ascendientes machos nunca hayan desarrollado la malformación.

Pero lo mínimo es informar, lo absolutamente imprescindible es indicar que en esa camada, como así fue en la de Yipon z Peronowki, hubo un macho con la malformación.

Hasta aquí lo relativo, hasta este punto lo estrictamente científico; asunto en el que tan siquiera hay unanimidad en el colectivo veterinario. Pero sí hay unanimidad en una aspecto…….la prudencia y la profilaxis preventiva.

Poco o nada puedo hacer ya, pero le debo a Ciro estas líneas, le debo a todo aficionado o propietario esta vivencia…y la realidad es cruda, rotunda y aplastante.

Yipon z Peronwki, al parecer, no ha desarrollado la malformación; sin embargo uno de sus hermanos de camada si….y hoy Ciro también.

La secuencia es relativamente lógica y no es necesario ser genetista para entenderla.

Si esa camada de machos de Yipon, y probablemente sus ascendientes, hubiesen sido apartados de la reproducción….. hubiese dado lo mismo si la madre de Ciro diese positivo….siempre que se cruzase con un macho libre en su ascendencia.

Nunca imaginamos vernos en esta tesitura, nunca quisimos protagonismo ni polémicas.

Hoy, cuando hemos hecho publico el problema, el cielo y la tierra se han movido; del cielo han bajado ángeles negros y de la tierra han surgido diablos blancos.

Y no precisamente para interesarse por la salud de Ciro, no para preguntar si se ha tumorizado el testículo oculto…..en ningún momento para pedir disculpas.

De este asqueroso mundillo no espero nada, de las personas menos aún.

Harto ya, de tanto ganadero de perros, de tanto mercader, de tanto Dios en la tierra y de tanta gilipollez; hasta los mismísimos del silencio cómplice y del coro de palmeros y palmeras que lejos de gritar ya basta siguen elucubrando sobre el sexo de los ángeles……

El templo de la devoción ha sido invadido por los mercaderes de la ocultación y ante todo mercaderes de ilusiones y futuro….mi desprecio más absoluto a esos dioses de barro, a esos payasos peligrosos que juegan con lo más sagrado……con la bondad de aquellos que se disponen a compartir toda una vida con un animal.

Nadie es perfecto, todos podemos equivocarnos, pero a sabiendas… quién actúa de manera irresponsable… se le debe calificar como merece.

Cortázar estaba lejos de todo, yo cada día estoy más cerca de Ciro; y más alejado de todos aquellos que habéis convertido esta devoción en una secta satánica y mercantil.

Oculto y sin embargo latente.

“El tiempo saca a luz todo lo que está oculto y encubre y esconde lo que ahora brilla con el más grande esplendor”. Quinto Horacio Flaco, recordado como Horacio y considerado el principal poeta, lírico y satírico, en lengua latina. Fallecido en el año 8 a.C.

Hay cuestiones que me enervan y me provocan….y uno, que suele ser fácil de contentar, no puede evitar entrar al trapo.

Porque en esta vida hay trapos limpios, sucios y de mercadillo; los hay impolutos, como también existen trapos manchados con la dignidad de los avatares de la propia vida. Trapos respetables al fin y al cabo, parte del ajuar de cada cual.

Pero lo insoportable son los trapos que tapan, ocultan y deforman el fondo y la forma.

Esos no merecen más respeto que el basurero más cercano, y en ello estamos.

Desde que me aproximé a esta increíble raza intento observar, aprender, compartir y ante todo ser  ecuánime…otra cosa muy distinta es que lo logre.

En estos años he vivido intensamente mi devoción, he sufrido…sí….he sufrido lo indecible, al comprobar que al igual que en cualquier otro ámbito social en este “mundo” nada es lo que parece.

Resulta paradójico y me mosquea sobremanera, me pone de muy mala leche; se supone que, todos aquellos que en algún momento nos aproximamos al perro lobo checoslovaco, que convivimos con ellos, somos ante todo devotos de la raza.

Nos mueve, o nos debiera mover, la admiración por ellos y por su bienestar presente y futuro; y sin embargo, resulta escandaloso comprobar como este “mundillo” es un lupanar dónde se prostituyen hasta las ideas.

Señores y señoras, me disculpen si no alcanzo a entender tanta gilipollez interesada.

Llevamos pocos años conviviendo en este país con el perro lobo checoslovaco, muy pocos en comparación con cualquier otra raza; y hoy, las camadas florecen cual campo de girasoles.

Se está produciendo una bestial irrupción de ejemplares en el mercado. Y nadie parece ser consciente, o no lo manifiesta, de lo que ello supone.

Y supone mucho, para la raza y para la propia sociedad en la que desembarca.

Esta raza no es un muñeco de feria, ni un pato de escayola que se coloca encima de una repisa, esta raza es distinta.

Lo es por derecho ajeno, al ser generada por el interés del hombre, y por derecho propio al existir; y es muy diferente por mucho que se intente suavizar el hecho.

Precisa conocerla a fondo, indagar sobre sus orígenes, ver y observar el resultado; precisa asumir una dedicación extrema, necesita una gran dosis de comprensión y respeto.

Y ante todo, al igual que unos pantalones de la talla 38, …..NO es para cualquier persona.

Y la peor falacia, el mayor daño que podemos generar, es ocultarlo.

Y así nos luce el poco o mucho pelo que adorna nuestras testas, la masificación nunca es buena…. y con el plc augura el desastre.

Y el silencio por bandera nos acompaña, un silencio atronador y dañino.

La masificación implosionará en esta sociedad, dos o tres años serán suficientes para comprobarlo; abandonos, incidentes, maltrato y eclipse del fulgor inicial.

Quizás sea agorero, poco realista o incluso un supino infeliz….pero lo que nunca seré es un ilusionista, un vendedor de crece pelo o un mercachifle de mercadillo.

Y en estas nos hallamos, sin ahondar en la importancia de conocer a la raza, encantados de nuestra particular “revolución industrial pelecera”.

Pero no seré catastrófico, en absoluto, aún hoy estamos a tiempo de cercenar la gangrena de la moda, el interés económico y la gilipollez pasajera.

Existen criadores admirables, que ante todo aman a sus ejemplares y por ende a sus descendientes, que se preocupan por seleccionar NO ya reproductores ……..seleccionan y forman a futuros propietarios…ahí reside la clave.

Todos tenemos una obligación para con esta raza, todos debemos aportar un poco; pero ante todo debemos lealtad y fidelidad, y por encima de cualquier otro interés debemos ser fieles a la verdad.

Y la verdad no vende, por desgracia la verdad vende poco; pero es preferible reducir el mercado, y lograr que esta maravillosa raza conviva con personas que asuman el reto.  

Horacio fue sin duda un gran poeta, pero ante todo fue un visionario; nosotros lo tenemos mucho más fácil……tan solo debemos ser fieles a la verdad.

Ellos lo agradecerán al ahorrarles sufrimientos.

Un ejemplo imborrable.

“Todo acto de bondad es una demostración de poderío.”. D. Miguel de Unamuno y Jugo, escritor, ensayista, filósofo, político y figura destacada de la llamada generación del 98 fallecido en 1936.

La bondad escasea en nuestros días, resulta huidiza y precaria; no renta mucho y en ocasiones resulta casi un estigma por el que se nos puede tachar de ridículos.

El ser humano es dual por naturaleza, anida en él el ying y el yang del taoísmo; somos parte del universo y por ende reflejo de todo lo que representa.

Cada día nos despertamos con alguna noticia impactante, con algún ejemplo del nivel de crueldad, sadismo o simple brutalidad del hombre para con el hombre.

Del mismo modo, noticias puntuales nos abofetean el alma con ensañamientos y torturas del hombre para con los animales; es así de sencillo y así de habitual……somos capaces de todo lo inimaginable.

Y en esa vorágine del despropósito, en ese carrusel diabólico, a veces perdemos la capacidad de sentir; perdemos esa parte noble que anida en nosotros y olvidamos que también somos capaces de ejemplos increíbles.

Nuestro lado criminal se eclipsa con actos de bondad, con pequeñas muestras de un gran universo; ni todos somos santos angelicales ni diablos retorcidos.

El ángel caído realiza su trabajo en la minería de los sentimientos humanos, pero en dicha mina a cielo abierto también trabaja en precario una pequeña legión de sublimes seres.

Se cosecha lo que se siembra y no hay más bemoles, es así de sencillo; nadie nace cruel ni angelical, nadie lleva en su trasero la marca del innombrable, ni abre los ojos con un aura celestial.

Somos lo que recibimos tras haber escogido, y cada cual es muy libre de ejercer el derecho a ser un soberano hijo de las tinieblas, un gran santurrón o simplemente un ser humano; he ahí el dilema……… y no es fácil ser humano.

Existen profesiones denostadas, estigmatizadas por los tópicos y arruinadas por su incomprensión;  doy fe de ello.

Pero siempre he reivindicado que al margen de clichés, y  estereotipos bastardos, hay una máxima…. el hábito no hace al monje.

Recientemente, en la ciudad de Alicante, se ha producido un hecho que pasará desapercibido; no llenará titulares de prensa ni moverá masivas emociones.

Varios agentes de la Policía Nacional acudieron a un aviso por maltrato animal en dicha ciudad, ya desde la calle observaron como un sujeto, por no decir un hideputa cum laudem, retiraba los cristales rotos de una ventana.

Al llegar al domicilio encontraron un cahorrín de 9 meses, temblando en un rincón y con la pata colgando; el sujeto responsable de su vida y calvario afirmó que se había roto la pata al ponerse contento y golpearse contra la ventana. El animal tenía fracturado el cúbito y radio.

Me permitirán que haga un inciso, un ejercicio de respiración para no estallar en una vorágine de exabruptos incontrolados, no es fácil controlar las emociones; y mucho menos las ganas de mentar al referido espécimen y a toda su puñetera ralea.

Al final se pudo comprobar que el pobre animal había recibido una paliza brutal, una salvaje paliza por parte de su “dueño”.

Además, posteriormente, se comprobó que también tenía fracturadas todas las falanges de una pata, así como sangre residual en los pulmones y el estómago…….. posiblemente por patadas.

El animal fue llevado por los agentes a un centro veterinario, allí les indicaron que si no era operado de inmediato quedaría cojo y tullido de por vida.

Ante la disyuntiva ambos agentes acordaron pagar el coste de la intervención, y un tercero se hizo cargo del cachorro que no tenía ni vacunas ni micro chip alguno.

Los gastos de la operación y el tratamiento han sido elevados, y debe ser sometido a otra intervención con el mismo coste (unos 700 euros cada intervención).

Me impresiona esta muestra de humanidad, me emociona ver a estos compañeros – que día a día viven el lado menos gratificante de nuestra sociedad – hacer un hueco a la bondad.

Me hace sentir bien, me hace mirar a los ojos a mis perros lobos checoslovacos y ser un poco mejor persona.

Estas pequeñas muestras de humanidad dicen mucho de sus autores, estas pequeñas gestas no se cantarán por bardos al calor de la hoguera ni serán motivo de recuerdo.

En muy poco tiempo olvidaremos a Óscar (que es el nuevo nombre del animal), olvidaremos a Pedro a Enrique y a Francés ( los agentes protagonistas de esta historia )…..olvidaremos que en Alicante se produjo un pequeño gesto y un ejemplo imborrable.

Los que convivimos con esta nuestra raza, en ocasiones, somos egocéntricos…. nos centramos en, por, y para el perro lobo checoslovaco; pero todos nosotros somos capaces de sentir el aliento de la bondad.

Hoy, y desde estas líneas, un gran acto de poderío se reconoce; un inmenso poderío de seres humanos que sirviendo a la sociedad no olvidaron a ese pequeño animal herido y apaleado.

Mis respetos compañeros, mi admiración y mi más profunda emoción.